En principio, en Abril debería empezar un nuevo ciclo de entrenamiento, preparar específicamente la pista al aire libre, para alcanzar mi pico de forma a finales de Junio. Sin embargo, los buenos resultados obtenidos en invierno hacen que tenga dudas. ¿Debo de seguir con la planificación de invierno, trabajando más ritmos aeróbicos y umbrales?. Por el contrario, ¿empiezo con el nuevo ciclo de entrenamiento según lo planificado en Septiembre, haciendo ritmos muy específicos de competición? Esto es como la soledad del empresario, tienes que tomar decisiones críticas en momentos importantes. Opción 1, empezar con la planificación pensada a principios de temporada, y así hacer entrenamientos más específicos enfocados al 1.500 y 5.000 m. Opción 2, seguir con los entrenamientos de Invierno, trabajando más a ritmo de umbral. Opción 3, un mix de la opción 1 y opción 2. Esta última opción implicaría trabajar ritmos específicos sin olvidar los umbrales de entrenamiento, que me han llevado a hacer tan buenos registros en este mes de Marzo. Mis sensaciones en entrenamiento me dicen que el trabajo a ritmo de umbral me sienta bien, recupero fácilmente los entrenamientos sin sobrecargarme en exceso. Sin embargo, pienso que para mejorar todavía más mi marca debería hacer ritmos de competición. Pero claro, hacer ritmos entre 2´40¨y 2´45¨ no es nada fácil. Además, cuesta mucho recuperar muscularmente estos entrenamientos, y entras en el peligro de no poder rendir en los entrenamientos de días posteriores. Es un riesgo, pero... el que no arriesga se estanca. Ya arriesgué en Septiembre apostando por entrenar más duro, con más intensidad. En los primeros meses me costó mucho adaptarme. Entrenaba bien, pero no terminaba de competir mejor que el año pasado. Después de 4 meses de intenso y duro entrenamiento, los resultados salieron. Aposté, arriesgué con el peligro de pasarme de tuerca, pero salió bien, muy bien. Mi cabeza me dice que tengo que hacer cosas más intensas y específicas para seguir mejorando, de lo contrario me estancaría. Pero estancarme en 14´33¨ tampoco está nada mal. Buffff... mejorar 14´33¨ es mucha tela. Pero creo que merece la pena arriesgar. Total, el 14´33¨ ya lo tengo. Para compensar el dolor de cabeza que he podido generar con esta entrada os pongo un toque dulce. Las galletas que hicimos en casa con los niños el Domingo. Hoy, dos días después, he pesado 1 kg de más.
martes, 29 de marzo de 2011
viernes, 25 de marzo de 2011
Lactatos para hacer 14.33 en 5.000 m
Ayer Jueves hice un test de lactato con dos objetivos: 1. Ajustar ritmos de entrenamientos para preparar la temporada de Verano, y 2. Analizar cómo están mis umbrales después de haber hecho marca personal en 10 k ruta, y 5.000 m pista. Tengo que decir que la marca realizada en 10 k (30:36) era esperada y acorde con mis entrenamientos. Sin embargo el resultado del 5.000 m (14:33) fue una grata sorpresa. Como podía esperar, los resultados de ayer fueron excelentes, indicando que el programa de entrenamiento seguido meticulosamente ha sido muy positivo. Dejaremos los entrenamientos realizados en los últimos meses para otra ocasión, y nos ceñiremos a los resultados del test de lactato de ayer. Intentaré evitar lenguaje técnico en la interpretación de los resultados. Al igual que hace tres meses tomé 5 muestras de lactato, pero esta vez tomando la primera a ritmo de 4:00 min:seg/km en lugar de 4:20. Así, la última fue tomada a ritmo de 2:40 en lugar de 3:00. El test fue realizado en la pista de atletismo, tomando cada muestra después de realizar 4 vueltas (1600 m). Adjunto la gráfica, color negro y rojo corresponden a los resultados del 4 de Enero y 24 de Marzo, respectivamente. Observamos que a ritmo de 3:20 mi nivel de lactato del 24 de Marzo es muy inferior al obtenido al mismo ritmo el 4 de Enero (2,6 frente 3,1 mMol/L). Además el nivel de lactato a ritmo de 3:00 en Marzo es similar al obtenido en ritmo de 3:20 en Enero (3,3 frente a 3,1). En otras palabras, los rodajes que hace meses realizaba a ritmos de 3:20 ahora los estoy haciendo a ritmos cercanos a 3:08. Y las series que antes realizaba a ritmos de 3:08, actualmente hago por debajo de 3:00. La intensidad (pulsaciones) de antes a 3:20 ahora es la misma para ritmos de 3:08. De igual manera, la intensidad en Enero para ritmos de 3:08 ahora corresponde a los ritmos entorno a 3:00 min:seg/km. Con estos datos en la mano, ahora sí me explico cómo pude hacer 14.33 en 5.000 m. Claro, a 3:00 voy como una ¨rosa¨, y así mis niveles de lactato a este ritmo todavía no se disparan. Otro día compartiré con vosotros los entrenamientos realizados en los últimos tres meses que han llevado a esta mejora. Sin embargo os adelanto que también ha habido un trabajo muy grande desde Septiembre a Diciembre. Pero la reflexión más importante para mí de todo esto es que con 41 años que cumpliré la próxima semana todavía ha habido posibilidades de mejora con respecto a las marcas realizadas con 28 años. Ahora bien, con un entrenamiento muy meticuloso y perfeccionista. Y sobre todo con mucha mucha.... motivación y pasión.
lunes, 21 de marzo de 2011
De Los Corrales de Buelna a la realidad del día a día
Este pasado Sábado competí un 5.000 m.l. en la pista de Los Corrales de Buelna, Cantabria. Intentaré sintetizar lo mejor posible todos los pensamientos que fluyen por mi cabeza ahora mismo, y hacer una crónica no demasiado extensa. A diferencia de lo que en mí es habitual, esta vez podría estar escribiendo durante días. Haré corto algo que fácilmente podría ser muy largo. Creo que ha sido, con diferencia, la mejor carrera que he hecho desde que empecé a correr hace 28 años. Para mí, una marca espectacular (14´33´04), en la que pienso queda plasmado todo el entrenamiento realizado desde los 13 años de edad. Bueno empecemos y vamos al grano. Toda la semana pasada tuve dudas de poder recuperar al 100% del enorme esfuerzo realizado en Laredo, me vacié por completo. El miércoles seguía con sobrecarga muscular, algo lógico, puesto que estaba todavía en el período de recuperación marcado por la ciencia. El Jueves descanso total, y sólo hago una buena sesión de estiramientos de 30 min. Estirando las sensaciones habían mejorado notablemente. El Viernes por la mañana, muy temprano (6.45), no hay opción de otra hora, salgo a hacer un rodaje de 10 km (que finalmente fueron 12 km), con espléndidas sensaciones. Mi cuerpo estaba recuperado. Justo, 6 días después del esfuerzo de Laredo. Una vez más, la ciencia es exacta. Después ducha, y llevar a los niños al cole (por cierto este es mi mejor momento todos los días). Ya en el trabajo, durante la mañana me ocurre algo increíble. Estoy ayudando a un ex-atleta a mejorar su hemiplejia originada en el año 2006 por una malformación arteriovenosa congénita en la parte izquierda del cerebro. Pues bien, el Viernes por la mañana fue el primer día que pudo correr desde el fatídico 7 de Diciembre, 2006. Me saltaban las lágrimas de alegría al ver su cara de felicidad cuando de repente decide correr en lugar de caminar. Un gran logro para él, y presagio de un gran fin de semana. Al igual que hice la semana pasada, también decido salir hacia Cantabria el día previo a la competición, para llegar en las mejores condiciones posibles. El Sábado por la mañana, hago mi habitual rodaje de activación, 6 horas antes de la carrera. De nuevo, sensaciones impresionantes, muchas ganas de correr. Lo mismo me ocurre durante el calentamiento previo a la competición. Me pongo los clavos, y siento mucha fluidez en la carrera, facilidad de desplazamiento sobre el rápido tartán de Los Corrales. Mi principal temor era salir el primer 1000 demasiado rápido. Lo ideal era pasar en 2´57¨y terminar así alrededor de 14´45¨. Mi grupo pasa el primer 400 en 1´12” (ritmo de 3´). Yo pienso, no pasa nada, todavía puedo terminar por debajo de 14´50¨ si soy capaz de acabar fuerte el decisivo y más importante último 1000. El ritmo se acentúa en la segunda vuelta para pasar el primer mil finalmente en 2´57¨. Perfecto, la cosa va de cine. Seguimos a rimo vivo para pasar en 5´49¨ el segundo mil (2´52¨ de parcial). Mis sensaciones son inmejorables, ¨Luis disfruta de esta carrera, pienso¨. El paso por el 3000 lo hacemos en 8´45¨ (2´56¨). Sigo muy fácil, y entramos en el siempre km más duro de un 5000, del 3 al 4, donde más se sufre. Pero yo voy ¨volando¨ en sensaciones. Sin embargo hacemos este parcial en 3´, marcando 11´45¨en el paso por el 4000. Por mi cabeza pienso que tengo que hacer el último mil como sea por debajo de 2´55¨para terminar en menos de 14´40¨. Seguimos en grupo, y decido saltar de él para ponerme a tirar y acelerar el ritmo, pero es otro atleta quien me lee el pensamiento y se adelanta a mi decisión (Isaac Rico). Buffff..... qué suerte he tenido, a seguir la estela que seguro que bajo de 14´40¨, estaba convencido. Lo que no sabía es que iba a ser capaz de hacer un último 400 en 1´05¨, y un último 200 en 30¨. Termino así el último mil en 2´48¨. En mi reloj veo 14´32¨ (oficialmente me dieron 14´33¨04). Lo más bonito de todo fue el final, no de la carrera, sino ya en meta. Veo a Sergio Fernández Infestas, con tendinitis de ¨caballo¨ y teniendo que competir una hora después, correr hacia mí, gritando, Luis has hecho el último 400 en 1´05¨!!!!! Gritaba una y otra vez, lo mismo, ¨has hecho el último 400 en 1´05¨. La alegría de Sergio era todavía superior a la mía. Sergio, multi-campeón del Mundo en 5.000 y 10.000 m categoría veteranos, con quien empecé a correr a los 13 años. Por cierto, minutos después Sergio batió el récord del Mundo en 10.000 m, categoría M55 con 32´15” (espectacular, con 55 años correr a 3`13¨/km durante 10 km). Sólo por ver la alegría que sentía Sergio, no por su carrera sino por la mía, merece la pena todo el entrenamiento realizado desde el mes de Agosto. Hoy, mi ordenador no ha parado de recibir emails de felicitación. En algunos de ellos la felicidad ha sido tal, que he tenido que cerrar el despacho para ocultar mis emociones al resto de mis compañeros de trabajo. Quizá penséis, parece que ha batido el récord del Mundo. Bueno, para mí, he batido Mi récord del Mundo. Perdonad si transmito en algún momento prepotencia, pero los que me conocéis bien, sabéis que no es así.