Behobia, una de mis preferidas

Mi primera Behobia-San Sebastián (BSS) fue en el año 1989 (1h 06 min), con 19 añitos. Recuerdo ese día como si fuera ayer, en la salida, era un niño, cursando segundo de licenciatura en la Universidad de Navarra. Desde entonces la BSS ha quedado marcada en mi calendario atlético. Aquel año éramos algo menos de 2.000 personas, este Domingo seguro que superamos los 25.000. Mirando el perfil de la carrera podemos pensar que es una prueba dura, pero en realidad no lo es tanto. El secreto para hacer una buena marca es salir conservador. Esto es así en la mayoría de las carreras, y si no que se lo pregunten a Mutai (2h 05 min 03¨ en NYC, con parciales de 1h 02min 43¨ y 1h 02min 20¨, impresionante). En la BSS si sales controlando el ritmo, en los últimos km se puede volar. Sin embargo, si te pasas de ritmo y llegas al alto de MiraCruz justito, en los últimos 4 km te bloqueas, a pesar de tener desnivel favorable. Voy como siempre con muchas ganas de competir, aunque las últimas dos semanas no he hecho ni mucho menos buenos entrenamientos. Las sensaciones no están siendo buenas en los entrenamientos, pero el Domingo en la salida espero que todo sea distinto, disfrutar de la carrera para rendir al máximo. El ambiente de la BSS es especial, e intentaré envolverme en la carrera y en el público para estar lo más adelante posible. El puesto probablemente sea lo de menos, porque depende de los atletas que corran. Sin embargo el tiempo del año pasado (1h 04min 29¨) sí debe de ser una referencia, aunque las condiciones físicas y mentales en las que voy este año son peores. Hoy he realizado mi último entrenamiento fuerte previo a la carrera. Ha consistido en 4 km a 3´20¨, 2´de recuperación al trote, 10x400 (1´13¨) con 35¨de recuperación al trote entre 400, después 40¨de recuperación al trote para terminar con 3 km a 3´20¨. Este entrenamiento me gusta bastante para preparar carreras de 20 km. Los primeros 4 km son para cansar un poquito la musculatura. Pasar a los 400 para utilizar fuente energética de competición (glucógeno) y así asemejar las condiciones de carrera. Los últimos 3 km son para acostumbrar a músculo a utilizar ácidos grasos después de haber empleado glucógeno como fuente energética en los 400. Básicamente lo que intento es transferir con este entrenamiento lo que normalmente ocurre en las competiciones de larga distancia. Suerte para todos los que corráis la BSS, y los que no os deseo entrenamientos exitosos para el fin de semana.