Canillejas 2011, Crónica

Llegaba el día de Canillejas, después de unas semanas un poco raras, con falta de descanso, días de insomnio, y con la cabeza en otro sitio. Todos estos factores son poco habituales en mí, puesto que suelo ser muy regular, equilibrado y centrado en los tres aspectos más importante de mi día a día; familia, trabajo y entrenamiento. Pero últimamente el estrés del trabajo ha estado rompiendo este equilibrio, y aunque no he dejado de entrenar, sí me ha limitado mucho el descanso necesario para la adecuada recuperación de las exigentes sesiones de entrenamiento. Yo pienso que el sobre-entrenamiento no viene por el exceso de entrenamiento sino por la falta de descanso. Y éste ha sido mi problema en las últimas semanas; he seguido entrenando fuerte, pero descansando menos, bastante menos de lo que es habitual en mí; claro, esto no es sostenible, traduciéndose en malas sensaciones, pesadez de piernas, falta de fluidez. Sin embargo, las dos noches previas a la carrera dormí muy bien, y muchas horas seguidas sin despertarme. Aún así, el sábado me levanté agotado, quizá por haber dormido tanto después de todo el cansancio mental acumulado. Me planteé incluso no competir, porque mis movimientos eran cansinos y lentos. Las sensaciones en los 10 km que hice esa mañana no fueron buenas. La noche del sábado también dormí mucho, y seguido. Pero a diferencia del sábado, el domingo me levanté con buenas sensaciones, las mejores de las últimas semanas. Buena señal, pero todavía con muchas dudas de cómo iba a responder en la carrera. El calentamiento fue muy bien, fantásticas sensaciones. Lo mismo durante la carrera, fluidez y facilidad de zancada que no había tenido en todo el mes de Noviembre. El resultado fue bueno, 30´58¨; pero lo mejor la fuerza y ganas que tuve durante la carrera. Espero poder controlar el estrés mejor a partir de ahora, y saber compaginarlo con el descanso de los entrenamientos. Todo se aprende, y yo ahora estoy aprendiendo a convivir con el estrés. No dejaré de entrenar, porque nunca lo he dejado desde que empecé hace 28 años. Pero será importante saber gestionarlo para seguir entrenando a mi intensidad habitual. Por último gracias a todos los que me seguís en este Blog o en otras redes sociales, sois una fuente de motivación fundamental para seguir entrenando fuerte.